La manzana mordida. Astrid Lindgren

El pasado viernes 29 de marzo se estrenó en España 'Conociendo a Astrid', biopic dirigido por Pernille Fischer Christensen dedicado a la creadora de uno de los personajes más carismáticos de la novela infantil, Pippi Calzaslargas: Astrid Lindgren. Aprovechando la circunstancia, le dedicamos nuestro nuevo capítulo de La manzana mordida dedicado a mujeres escritoras.

Fuente: Wikipedia

Un 14 de noviembre de 1907 nació en Vimmerby, una pequeña ciudad al sur de Estocolmo, Astrid Anna Emilia Ericsson. Un nombre sueco típico sin más, ¿verdad? Cuando compartía juegos con sus dos hermanas y hermano nada hacía presagiar que se convertiría en uno de los escritores (genérico) más leídos de Suecia (y de Europa).  Desde niña, Astrid tuvo claro que su lugar estaba en la escritura gracias a sus buenas maneras y a su enorme curiosidad y así, en 1924, consiguió trabajo como redactora en un diario local de su ciudad natal. Además de aprender a desenvolverse en un mundo de hombres y conocer de primera mano los secretos del periodismo, Astrid también se hizo mayor a ritmos agigantados. Dos años después de entrar a trabajar se quedó embarazada de Reinhold Blomberg, director del periódico y hombre casado y con hijos. Él estaba dispuesto a pedir el divorcio pero Astrid se negó a casarse con él e hizo las maletas con dirección a Estocolmo. Allí tendría a Lars, su primer hijo, cedido en adopción. La vida corría a gran velocidad pero Astrid Lindgren no le perdía el pulso. Durante los años posteriores trabajó como secretaria en el Kungliga Automobil Klubben mientras estudiaba taquigrafía hasta que pudo recuperar a su hijo. En 1931 se casó con Sture Lindgren, jefe de la empresa. Tres años más tarde nacería su hija Karin y con ella el personaje de Pippi Calzaslargas.

Astrid Lindgren continuaba soñando con dedicarse a la literatura y no cejaba en su empeño. Un día tras otro enviaba textos y artículos breves a los periódicos locales llamando a todas las puertas posibles.  En medio de esos escritos y envíos, su hija Karin sufrió una neumonía y la figura de la pequeña pelirroja de trenzas alocadas apareció como ayuda a la enfermedad. Este personaje seguiría apareciendo en los cuentos caseros, pero también daría el paso a lo público: Astrid escribiría la historia de Pippi como regalo en el décimo cumpleaños de Karin. Y, precisamente en ese 1944 envió por primera vez el manuscrito a una editorial sueca. Las aventuras de Pippi fueron rechazadas, pero Astrid continúo escribiendo, consiguiendo rápidamente un segundo premio en certamen, llegando a publicar su primer libro: Cartas de Britta Mari. Fue el principio de su éxito como escritora especializada en literatura infantil y juvenil. Este premio le dio fuerzas y revisó la primera versión de Pippi Calzaslargas, realizó ciertos cambios y lo presentó un año más tarde a la editorial Rabén & Sjögren. A la segunda fue la definitiva y en 1945 se publicaron por primera vez las historias de Pippi, obra que convertiría a su autora en una de las autoras más seguidas dentro del panorama infantil. 

Astrid Lindgren, defensora del feminismo y de los animales, tuvo vida más allá de Pippi Calzaslargas, con obras como El gran detective Blomquist, Karlsson del tejado, Los hermanos Corazón de León o Ronja, la hija del bandolero. En 1958 recibió el 'Nobel de literatura infantil y juvenil', el Premio Hans Christian Andersen, y en 1994 recibió el 'Premio Nobel alternativo', el Premio Right Livelihood. Falleció en Estocolmo en 2002. Su figura fue, y sigue siendo, tan grande dentro del mundo infantil que cuenta con un parque temático, el Astrid Lindgrens Värld, dedicado a todo el imaginario de sus cuentos.