¡Hola a tod@s!
Antes de nada, ¡feliz año nuevo! Y como comenzamos nuevo mes y nuevo año hace muuuy poco, toca continuar con nuestras ya tradicionales efemérides. ¿Listos? ¡Allá vamos!
Como de costumbre, iniciamos nuestro viaje literario en el tiempo con escritores españoles. El día 5 de enero de 1942 nacía el escritor Terenci Moix, pseudónimo de Ramón Moix i Messeguer. Cinéfilo declarado, trataba temas cinematográficos tanto en sus libros como en revistas especializadas. También fue un enamorado de la historia de Egipto, por lo que sus novelas más célebres transcurren en el imperio faraónico. En su obra también aparecen elementos autobiográficos tales como la cultura catalana, la homosexualidad y la crítica al franquismo y la educación religiosa. En 1986 recibió el Premio Planeta con No digas que fue un sueño, aunque a lo largo de su vida obtuvo muchas más distinciones. Otras de sus obras destacables son El día que murió Marilyn, Mundo macho y Chulas y famosas.
Nueve años antes, el día 8 de enero de 1933, nacía Juan Marsé. Oriundo de Barcelona como Moix, las calles de su ciudad natal fueron parte importante del universo de su obra. En sus inicios, Marsé combinó la narrativa con trabajos de traducción, la redacción de textos publicitarios y la preparación de diálogos para otros guionistas. Aunque la censura franquista le prohibiera publicar Si te dicen que caí, comenzó a ganar popularidad en los años 70, cuando empezó a colaborar con la revista Por favor. El salto a la fama le llegó con La muchacha de las bragas de oro, con la que ganó el Premio Planeta. Asimismo, Marsé también ganó en 2008 el máximo galardón de las letras hispanas, el Premio Cervantes, por nombrar apenas un par de premios. Muchas de sus obras han gozado de gran fama y sido adaptadas al cine, como Últimas tardes con Teresa, El embrujo de Shanghai o El amante bilingüe.
Más de tres siglos antes, el 17 de enero de 1600 llegaba al mundo Pedro Calderón de la Barca. Este dramaturgo y poeta vallisoletano revolucionó la extensión y la métrica tradicionales del momento al darle más importancia al contenido que a la forma en su poesía. En teatro trabajó con todos los géneros: zarzuela, drama, tragedia, comedia e incluso teología mediante los autos sacramentales. Autor de más de doscientas obras, es uno de los grandes exponentes del Siglo de Oro. De sus obras queremos destacar El alcalde de Zalamea, El gran teatro del mundo y La dama duende, por nombras unas pocas de su extensiva creación. Cómo no, tampoco podemos olvidarnos de La vida es sueño, que ha sido llevada al teatro en incontables ocasiones.
Saltamos rápidamente nuestras fronteras dispuestos a cruzar el charco y avanzar casi trescientos diecinueve años en el tiempo. Así, nos encontramos con el nacimiento de Jerome David Salinger el primer día del año de 1919. Este autor estadounidense es mundialmente famoso por su obra El guardián entre el centeno. La obra gozó de tanto éxito que Salinger se vio abrumado por la fama y decidió alejarse del mundo de la literatura para proteger al máximo su privacidad. Para ello, se mudó de su natal Nueva York a New Hampshire, donde continuó escribiendo a pesar de no publicar nada más. Su retiro mediático se vio interrumpido cuando supo que pretendían publicar una biografía que incluía cartas escritas a amigos y otros escritores que, dicho de paso, acabó publicándose con el contenido de dichas cartas parafraseado. El guardián entre el centeno se considerada un clásico de la literatura contemporánea, aunque también es conocida por tratarse de la lectura cabecera de varios asesinos en serie.
Un año y un día después, el dos de enero de 1920, llegaba al mundo uno de los mayores escritores de ciencia ficción, Isaac Asimov. Este estudiante de Ingeniería Química y doctorado en Bioquímica, fue profesor de la Universidad de Boston hasta que se dedicó de pleno a su carrera literaria. Entre su obra cabe resaltar La fundación, un proyecto que se alargó durante años y que fue formando el universo en el que se basó gran parte de su trabajo. Varios de sus libros han sido adaptados a la gran pantalla, como El hombre del bicentenario o Yo, Robot. Entre los premios literarios que recibió, constan los Premios Hugo, Nébula o Locus. Aunque la mayor parte del público lo conoce por ser el creador de las leyes de la robótica y por sus obras de ciencia ficción, dentro de su prolífico trabajo también hay títulos de género policíaco, histórico y divulgativo. De hecho, Asimov siguió escribiendo durante toda su vida, hasta que falleció en 1992.
Continuando con otro autor de renombre mundial, el 3 de enero de 1892 nacía John Ronadl Reuel Tolkien, más conocido como J.R.R. Tolkien. Este escritor y lingüista británico mostró facilidad para las lenguas conforme cursaba sus estudios. Durante la Primera Guerra Mundial estuvo convaleciente un largo periodo, tiempo que aprovechó para escribir relatos situados en un mundo diferente al nuestro . Después inició su carrera como lingüista a la vez que comenzaba a escribir una historia localizada en el mismo mundo que había creado anteriormente. Así, publicó El Hobbit en 1937. Mientras trabajaba como profesor universitario en la Universidad de Merton, escribió una especie de continuación que fue dividida en tres libros por decisión editorial. El señor de los anillos disfrutó y sigue disfrutando de tanto éxito que ya se considera un clásico de la literatura universal. Se ha traducido a numerosos idiomas y también se ha adaptado al cine en dos ocasiones, aunque la más destacable es la que se inició en 2001y fue dirigida por Peter Jackson. Otros títulos a tener en cuenta son Los cuentos inconclusos, El Silmarillion o Los hijos de Hurin.
Treinta y nueve años y dos días después, el 5 de enero de 1931, venía al mundo Umberto Eco. El escritor es famoso por sus novelas históricas, pero también por sus ensayos sobre semiología y sus obras filosóficas. Como narrador, El nombre de la rosa fue la obra que le catapultó a la fama al convertirse en un superventas. Dicha obra fue adaptada al cine en 1986. A lo largo de su carrera, Eco alternó la publicación de ensayos y novelas como Los límites de la interpretación, El péndulo de Foucault, Cinco escritos morales, La isla del día de antes, Baudolino o El cementerio de Praga, entre otros. Caballero Gran Cruz de la Orden del Mérito de la República Italiana desde 1996, otros galardones que recibió y merece la pena recordar son el Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades o la Orden de Caballero de la Legión de Honor francesa.
Casi veinticinco años antes, el 9 de enero de 1906 nacía nuestra primera autora femenina de estas efemérides, Simona Lucíe Ernestine Marie Bertrand de Beauvoir, más conocida como Simone de Beauvoir. Profesora de Filosofía en varias universidades, al iniciarse la Segunda Guerra Mundial dejó la docencia para escribir. Después de la guerra trabajó en la revista existencialista Le Temps Modernes, dirigida por Sartre, mientras continuaba con sus escritos personales en los que defendía el comunismo, el ateísmo y el existencialismo. Autora de ensayos, novelas y una obra teatral (Las bocas inútiles), fue una feminista activista. De hecho, El segundo sexo, obra que la consagró, se considera una obra fundacional del feminismo. Otras obras a tener en cuenta son Los mandarines o sus memorias La plenitud de la vida, La fuerza de las cosas o Una muerte muy dulce, por nombrar unas pocas.
Tres siglos antes, pero en el mismo país, nacía un 15 de enero de 1622 el dramaturgo Molière. De nombre Jean Baptiste Poquelin, se le considera el padre de la Comedia francesa. Molière trabajó como director de teatro y actor, aunque sus farsas y obras cómicas cobraron fama en poco tiempo. En ellas trabajaba bajo la máxima de “corrige las costumbres riendo”, con lo que creaba arquetipos mediante los cuales ridiculizaba y criticaba la pedanterías de los falsos sabios, las pretenciosidad de la burguesía y la ignorancia oculta de los médicos... por poner unos ejemplos. Este hecho, junto con gozar del apoyo y la protección real que llegaron a consagrar su compañía de teatro como Compañía Real, hicieron que se ganara más de una enemistad. Algunas de sus obras a tener en cuenta son el Tartufo, El misántropo, El avaro, El médico a palos o El enfermo imaginario.
Casi doscientos años después y de nuevo en el continente americano, venía al mundo el escritor estadounidense Edgar Allan Poe un 19 de enero de 1809. Periodista y crítico literario además de poeta, Poe es mundialmente reconocido por su narrativa de terror. Con su estilo, Poe renovó la novela gótica a través de sus cuentos. Asimismo, fue el primer escritor estadounidense que intentó vivir de sus escritos, aunque ello le acarreara consecuencias lamentables. La muerte de su esposa a los 24 años provocó que Poe se derrumbara y sucumbiera al ya presente alcoholismo y al consumo de drogas. Sin embargo, esta debacle también dio lugar a algunas de sus obras más célebres y oscuras. En este sentido, cabe destacar su poema más famoso, El cuervo, y algunos relatos como El gato negro, El pozo y el péndulo, La máscara de la muerte roja, Berenice o El corazón delator. Por otra parte, fue el creador del primer detective moderno de la literatura, Auguste Dupin, por lo que se le considera el padre del género detectivesco por relatos como La carta Robada o El escarabajo de oro. También se le considera uno de los precursores de la ciencia ficción.
Setenta y tres años después y en esta orilla del Océano Atlántico nacía Virginia Woolf el 25 de enero de 1882. Woolf es una de las figuras más destacadas del modernismo literario del siglo XX, tanto por su obra escrita como por su trabajo como editora. Y no es de extrañar, ya que nació en un hogar acomodado que frecuentaban algunas de las mayores figuras artísticas de su época. Junto con su marido y también escritor Leonard Woolf, fundó una de las editoriales más importantes de principios de siglo, Hogarth Press. Entre sus obras cabe destacar La señora Dalloway, Al faro, Orlando (dedicada a una de sus amantes) o Las olas. Wolf también fue una firme defensora de los derechos de la mujer, algo que puede verse en su libro ensayístico Una habitación propia. Dado que siempre tuvo tendencias depresivas, Woolf acabó con su vida lanzándose al río Ouse.
Y no queríamos terminar estas efemérides sin nombrar a Anton Pávlovich Chéjov, médico, escritor y dramaturgo ruso. Nacido el 29 de enero de 1860 en una familia muy humilde, Chéjov empezó a escribir relatos humorísticos para ayudar a la economía familiar y, así, ganó cierta popularidad. Su obra se encuadra en el realismo y naturalismo más psicológicos, y cabe destacar sobre todo su maestría en los relatos cortos. Además, Chéjov también escribió obras de teatro muy exitosas, de un estilo naturalista con ciertos toques de simbolismo. En este género ideó una nueva técnica dramática conocida como “acción indirecta”, en la que se da más importancia a la caracterización y la interacción entre los personajes que al argumento (la “acción directa”). Por ello, en sus obras muchos hechos importantes suceden fuera de escena y lo que no se dice a veces es más importante que lo que los personajes expresan. Algunos ejemplos de esto son las obras La gaviota, Tío Vania (su obra más popular) o El jardín de los cerezos. Chéjov siempre estuvo socialmente comprometido, con lo que organizó campañas para ayudar a los más necesitados e incluso creó varias escuelas para niños antes de fallecer de tuberculosis.
Y aquí terminamos con nuestras efemérides de enero, esperamos que os hayan gustado. Si queréis, no dudéis en dejar un comentario. ¡Nos leemos en breve!
¡Hola!
ResponderEliminarVaya, qué de autores nacidos en enero :O
Qué puntería Salinger, asomando su cabecita al mundo el primer día del año ^^
Tampoco sabía que Tolkien hubiera nacido en enero y tengo unas ganas de leer algo de Virginia Woolf impresionantes :D En clase estuvimos viendo algún que otro ensayo o artículo y poco más.
¡Un beso!
¡Hola, Mari!,
EliminarLa verdad es que las efemérides de Akasha nos descubren miles de curiosidades cada mes ;)
Yo también quiero leer algo de Virginia Woolf y ya tengo "Una habitación propia" esperándome.
¡Nos leemos! ¡Hasta pronto!
¡Hola Mari! Gracias por el comentario. Veo que a ti también se te acumulan las lecturas pendientes, jijiji ;)
EliminarUn saludo!
Tengo pendiente de leer algo de Isaac Asimov porque solo leo críticas buenas. Y otro que conocía era J.R.R Tolkien pero no creo que me anime con El señor de los anillos. Calderón de la barca también me suena de clase y por supuesto Poe, que leí algo en el instituto y la verdad es que me gustaría leer algo más. Un beso
ResponderEliminar¡Hola, Almudena!,
EliminarMuchas gracias por el comentario. La verdad es que mes tras mes, no vemos más que buen@s autor@s a los que desearíamos poder hincarles el diente :) Si te animas con algun@, nos lo cuentas ;)
¡Nos leemos! ¡Hasta pronto!
¡Hola de nuevo, Almudena!
EliminarYo de Asimov solo he leído Yo, robot. Y aunque me gustó, me costó un poco leerlo, la verdad.
De Tolkien, si te interesa pero no quieres leer algo tan largo como El señor de los anillos, el Hobbit es interesante y mucho más corto.
Y Poe... bueno, yo leí algunos de sus cuentos en la universidad, y más de uno me impresionó bastante.
Un saludo :)
Hola!
ResponderEliminarBonito blog, te sigo
mi blog es https://libertaddeloslibros.blogspot.com.es/
un beso
¡Hola, Nerea!,
EliminarNos alegra que te guste nuestro blog y lo que hacemos en él :)
Nosotras también te seguimos.
Un saludo y hasta pronto ^^.